Cuando nos referimos a ropa para perros nos viene a la mente la imagen de nuestro poodle, tan lindo, llevando su tendida de moda. Pero vestir a un perro puede ser algo más que tratar que se vea bonito. La ropa puede protegerlo de elementos del ambiente por el que se mueve. Y acercarse a un perro vestido puede resultar más fácil para la gente que teme a estos animales.
Si un perro juega o tiene su espacio en un hábitat con suelo rocoso, puede ser necesario que calce botas. Las rocas afiladas pueden provocar cortes en las patas, causando heridas y dolor. Los perros que viven en lugares donde la temperatura es muy elevada durante el día pueden necesitar calzar botas para proteger sus patas del suelo caliente. Después del ataque de las Torres Gemelas, se pidió a los voluntarios que donaran botas para los perros que participaban en las labores de rescate, para que no se hirieran con los metales y otros materiales que pudieran pisar.
Igual que los humanos, un perro que lleve un impermeable se mantendrá seco y calentito.
Un abrigo puede ser necesario para aquellos perros que están en un clima muy frío. Otro punto a tener en cuenta es el corte de pelo de nuestros poodles: hay que tratar de dejarles el pelaje más largo en épocas frías y más corto en épocas calurosas. Los bóxers, por ejemplo, tienen un pelaje muy corto y necesitan llevar un vestido para mantenerse calientes (si viven en la intemperie).
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